Nombre: Gastón
Ubicación: Miraflores, Lima, Peru

miércoles, 25 de enero de 2006

Una historia de los Helmónidas

Vengan y siéntense un rato, que les voy a contar una historia. Han pasado años y ya que preguntan, les diré cómo paso. En primer lugar porque tiene cara de niños que han comido caliente toda su vida, y piensan que los buenos son buenos y los malos son malos.

Aquella tarde nos encontrábamos en la garganta del cañón de Oakhurst y habíamos bajado con dificultad. Si yo fuera tu, chico listo, me quitaría esa capa de terciopelo rojo; si vas a jugar al héroe que salva el mundo, mata al malo y salva a la princesa, tu capa y tu escudo brillante no harán la diferencia con lo que lleves adentro de ti.

Matar.

Ibamos cubiertos de polvo, cuando los vimos venir. Nos cargaron de frente, a unos doscientos metros de distancia. Apenas si tuvimos tiempo de formarnos para recibir el golpe. Una docena de lobos montados por goblins se nos venía encima. Y si no sabes lo que es un goblin, pecosita, suelta ese arco y escucha de una vez. Un goblin es algo así como un barrista de fútbol, mezclado con obrero despedido de Construcción Civil y los que gobiernan desde el Congreso, pero de piel verde, peor aliento, y una espada en la mano. Si no sabías, mejor deja la taberna y vuelve a casa mientras dos piernas puedan llevarte. Les decía.

Las criaturitas se nos venían encima. Los que estábamos en condiciones, sacamos nuestros arcos y abrimos fuego, mientras que cualquiera que pudiera lanzar un hechizo intentaba contener a la marea verde. No se detuvieron los que quedaban en pie. Cincuenta metros, cae una más. Veinte, nos lanzan algunas jabalinas. Cinco metros, ya podemos sentir el olor. No queda tiempo para una oración, echamos los arcos al suelo y sacamos nuestras espadas. El choque fue tan ruidoso como brutal.

Quien haya tenido oportunidad de matar, o de ver morir de cerca, sabe que esto no tiene nada de glorioso. Todo lo ves bajo un velo negro, en un caos de miedo y pesadilla mientras vas repartiendo tajos, y el brazo te arde de tando abrir la carne que se te pone adelante. Las pobres bestias no duraron ni dos minutos contra nosotros.

Es deber del fuerte oponerse al que amenace al débil.

Los últimos cayeron con una flecha en la espalda mientras intentan huir. Y no nos mires como si quisieras juzgarme, niño bonito, que no estabas allí. Nunca pensé que Helm me tendría preparado algo así. Ni hablar, había que proteger al desvalido. Seguimos el rastro de los lobos hasta una cueva, su hogar. Entonces los vimos.

Había una veintena de mujeres y crías de goblins acurrucada en uno de los rincones. Esto es algo de lo que difícilmente un paladín se sentiría orgulloso, pero la verguenza es parte de la culpa que se debe cargar. El fuego de la fogata hacía brillar los petos y la sangre negra que chorreaba por los codos. ¿Qué diferencia a un hombre de una bestia?

Nuestras sombras se reflejaban enloquecidas en las paredes de la cueva mientras la carne se hendía una y otra vez bajo nuestros filos. Han pasado muchos años, y por las noches aún escucho los chillidos espantosos, los ojos desorbitados y llorosos, los dientes partiéndose en las cabezas destrozadas. Una bestia malvada es una bestia malvada, y los buenos matan a los malos. Así dicen los libros. Mata a la cría mientas es un niño y tu fuerte, para que no busque su venganza cuando seas un anciano débil y él maneje una espada. Ulises lo tenía muy claro cuando arrojó a los hijos de Héctor de las murallas, esa noche, del caballo.

Siempre me quejé de los cruzados. De Balduino y Behomundo entrando a saco en Antioquía o Jerusalem. Caminando con Guy de Lusignac en 1198, en diez centímetros de sangre por las calles, según consta en los escritos, mientras los hijos de la Media Luna son degollados por los seguidores de la Verdadera Fe. Porque eran malos y los cruzados buenos, y así tenía que ser. Yo también creía en buenos y malos mientras hacía un juicio en otra taberna de otro lugar.

No dejamos ni uno sólo. La ley que me gobernaba por dentro decía que estaba bien, o mejor dicho, que no estaba mal, que la maldad debe ser extirpada de raíz y de manera rápida. Es deber del fuerte oponerse al que amenaza al débil, repetía mecánico, mientras procuraba no ver mi sombra agigantada por el fuego abalanzarse sobre mi presa. ¿Quién es el débil. Mi sentido del deber, los goblins que no merecen vivir, los aldeanos que ellos matan con regularidad?. ¿Mi fe?.

Yo era un soldado santo y mi Fé decía que no debía avergonzarme de mis actos. No lo sé. ¿No es terrible?. Pelear por lo que quieres, sanar, curar, proteger, amar, matar por lo que crees, y terminar diciendo que no lo sabes, delante de un puñado de chiquillos que nunca han visto escupir sangre a un hombre herido.

Al final nos retiramos. Nadie volvió a hablar del tema, pero yo sabía que algo no estaba bien. Me gustaría saber cómo acabará mi propia historia. eso es todo chicos. Al menos por mi parte.

Si no entendieron, es que no estuvieron allí. Así es este juego, niños.

9 Comments:

Blogger Gonz said...

¡ ¡ ¡ 500 xp ! ! !

8:42 a. m.  
Blogger Tortuga Maldita said...

Este comentario ha sido eliminado por el autor.

12:07 p. m.  
Blogger Tortuga Maldita said...

Este comentario ha sido eliminado por el autor.

12:40 a. m.  
Blogger Toñito Avalos said...

arrrrrrrrrrrrr!
saludos,señor Gastón!
vaya genialidad de relato,uno mismo siente q está viviendo lo que narra,lo cual indica su capacidad narrativa.Con todo respeto,felicidades!
Por cierto,qé bueno q le gustaron los posters de coca cola,salud!jaja
Hey,sus relatos están como para ilustrarlos!!

saludos
y vamos q vamos,vaaaaaaaaaamos con el bloooog!!
arrrrrrrrrr!

1:25 p. m.  
Blogger Gastón said...

Gracias Tortui por el comentario sesudo, Gracias Gonz por los 500, los iba a necesitar. Gracias maistro por los halagos, y se peló porque ahora quiero mi dibujo, arrr.

11:16 p. m.  
Blogger Omar Cisneros said...

Excelente viejo. Muy interesante tu manera de contar un relato de D&D.

6:26 p. m.  
Blogger Gastón said...

Manya, manejas el bizz. Bien por tì, jajaja. En algún momento llegarà la segunda parte.

9:09 p. m.  
Blogger Tortuga Maldita said...

Llego de Helm el Paladin,en nombre de su Dios. Sapee. Croac!

11:39 p. m.  
Blogger Tortuga Maldita said...

Este comentario ha sido eliminado por el autor.

9:16 p. m.  

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