Fin de fiesta

Vaya, han pasado varias cosas, y no he tenido tiempo ni de sentarme en el blog. Noté que en el último mes prácticamente no descansé ni sábados ni domingos. Hice un pequeño repaso y teníamos que: primero vino el sismo de Ica y me pasé los como puse, en el tema de la recolección de donativos. El siguoiente fin de semana estuve en Ica mismo; el siguiente, me dieron un descanso por el tema del sismo. Eeeel siguiente me la pasé en Majaz, cosa de la que nunca tuve tiempo de postear. Eeeeeel siguiente (esto no se acaba nunca, verdad?) tocaba extraición, asi que me la pasé con la lengua afuera.

Finalmente, el siguiente fin de semana, o sea, el que pasó, tuve un poco de pausa. Sábado y domingo para pasarla solo con Lore, y por supuesto, nos fuimos al concierto "Un canto por el Sur". Un espectáculo de primer calidad. A más de un mes de la desgracia, toda esa gente allí dejando su platita para el concierto.

Y allí estaban también las imágenes de lo ocurrido. Fotos en color y blanco y negro de la tragedia. Y no se si la gente es imbécil, posera o fácilmente impresionable, pero todos empezaban a decir, qué horror, pobre gente, mira esas ruinas y los muertos. Lore y yo nos mirábamos; todos parecían -parecían- conmoverse con niños vendados, y toda la parafernalia típica de una zona devastada. Las más efectistas, claro, las que más venden.

Y nosotros parados allí en medio de esa masa anónima, sin entender qué es lo que encontraban de particular en eso. Nos mirábamos uno al otro en silencio. No había nada que decir, ya sabíamos lo que pensábamos, lo que vivimos cada uno en su momento. Nosotros fuimos a ver un concierto y nos damos de cara con toda esta gente que se reúne para decir, pobrecitos y mira qué buenos somos nosotros que los ayudamos.

Empezó el concierto, claro. Y la gente se olvidó de las fotos y gritaba "Sí se puede!". Y nosotros abrazados, viendo toda esa solidaridad y toda esa música. Así es, y así será siepre. Y esa alegría fue el cerrar un círculo de pena y privaciones. El saber que ya estábamos al otro lado, más allá de cualquier foto.

Hay algunas historias que no te dejan moraleja. Sólo son.